Al ser Bolivia centro de origen de diversos vegetales y animales, el potencial que tiene para alimentar a su población y la de otras regiones, es muy grande.
En la medida en la que la población se alimente con productos de la agrobiodiversidad, la calidad de sus dietas mejorará significativamente y se fortalecerán los sistemas alimentarios, haciéndolos más resilientes a los efectos del cambio climático y por lo tanto, sostenibles.
La identificación de especies de la agrobiodiversidad, su caracterización agronómica y el estudio de su potencial contribución a la mejora de la calidad de la nutrición de las personas, son algunas de acciones clave de esta línea estratégica que se desarrollan a través del programa de agrobiodiversidad.